rebeldia extranjera

Busquemos la palabra rebelde, rebeldía, rebelarse en el diccionario de la Real Academia Española.
Adjetivo. Que se revela ante una obediencia debida. Winston Smith, el personaje del libro 1984 es, si así se lo quiere, la rebeldía personificada.　

Con la que descripción que dimos anteriormente podemos llegar a la coyuntura de que una persona no solamente se puede rebelar en distintas facetas de su vida, por ejemplo en su casa, ante sus padres, en el trabajo, en la vida misma, sino que también adentro de una cancha de juego que es el tema que nos compete.


¿De qué manera se puede rebelar un jugador de fútbol? Hay muchas maneras. Se puede revelar ante un dibujo táctico, romper el esquema del entrenador, tirando un caño, una fantasía, o simplemente mostrando algo diferente al futbol opaco, aburrido, y sin ideas donde se pregona la marca y el juego brusco ante la magia, la habilidad y el buen pie.

¿Quiénes pueden rebelarse? Solamente los que se animan. Los que tienen el coraje para enfrentarse a lo desconocido con el único objetivo de verses victoriosos y con sus ideales a flor de piel. Los que encaran, los que gambetean para adelante, pero también los que se toman un segundo para pensar, tomar la decisión correcta y así meter el pase preciso, oportuno y decir “toma, hacelo”. Los que cuestionan la manera de jugar actual. Los que se niegan a que el físico prevalezca ante la táctica y la habilidad (como en el relato algunos se negaban al avance de la tecnología, mientras que otros ignoraban las consecuencias de ésta). ¿Se imaginan el fútbol sin lujos? ¿Netamente físico? Cada día nos acercamos más a tal destrucción. Sin embargo algunos desobedecen al sistema y reinventan día a día el verdadero significado del fútbol. Los que creen en si mismos, los que no negocian con el enemigo. Los jugadores exquisitos. Los Enzo Francescoli, los Paulo Silas, los Albeiro Uzuriaga, los Giovanni Moreno. Al igual que en el libro los de Oceanía tienen su propia lengua ellos también, aunque manejan el mismo idioma parecería que tienen otro, el de la raza extranjera.